SINOPSIS
Esta es la historia de un gran amor. Ese que se requiere para producir los brebajes más complejos y exquisitos. Nos referimos a licores, elíxires, néctares y grandes vinos que sólo unos cuantos, los más afortunados, pueden crear. El romance tiene un final feliz pues serán disfrutados, muy lentamente, en un momento muy especial en la vida de sus privilegiados dueños.
Su enorme sofisticación se debe a que engloba matices de más de 400 eau-de-vie (término para referirse a los brandis que nacen de frutas que no son uvas) poco comunes, provenientes de la Grande Champagne y de Borderies. Está pensado para verdaderos conocedores, esos que buscan la cúspide del refinamiento. No por nada, Christophe Valtaud, Maestro de la bodega, lo define como la quintaesencia de los coñacs.
Resalta los principios rectores The Macallan: maestría, artesanía y creatividad. Es una oda a los alambiques pequeños, una de las cualidades
que definen su proceso de destilación, y que es clave en su elaboración. Al catarlo, destaca el sabor a mantequilla, su explosión afrutada y las bondades de una pizca de malta.
Dominio de Pingus es una pequeña bodega artesanal fundada por el ingeniero agrónomo y enólogo danés Peter Sisseck. En ella se elaboran algunos de los vinos más buscados de España –y del mundo–. Su secreto radica en sus viñas de más de 60 años de Tinto Fino (tempranillo que crece principalmente en la Ribera del Duero), en donde cultivan, de manera controlada, todas sus uvas.
Nuestra inspiración:
Diamantes en bruto (Uncut Gems) es un drama de suspenso estadounidense que narra la historia de un carismático joyero que vive siempre al límite, y que realiza una apuesta de alto riesgo relacionada con una extraña roca con diamantes provenientes de Etiopía. La película recibió elogios de la crítica, especialmente por la actuación de Adam Sandler. Fue elegida como una de las diez mejores películas de 2019.
Su elaboración es resultado de una mezcla casi mágica entre el saber hacer, el arte y la paciencia. Combina sabiamente aromas de jazmín, azafrán, mirra, miel, ciruela, higos y maracuyá. Su sabor es increíblemente intenso gracias al uso de tierçons de roble (barricas centenarias que fungen como pequeños santuarios) en donde el eau-de-vie (brandy de doble destilación y compleja fermentación) se añeja con toda calma y dedicación.
Se trata de la más lujosa expresión de un siglo de sabiduría, con la que casa Andrés Brugal celebra su fantástica trayectoria de más de 130 años. Hoy, Jassil Villanueva, Maestra Ronera (parte de la quinta generación de herederos), rinde un merecido homenaje a este invaluable legado, creando una declaración magistral de excepcional carácter dominicano.
JORGE GARAIZ
Fotografía
EMILIANO MILESCI
Arte
